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dc.contributor.advisorJimenez Torrado, Carmenza (Tutora)
dc.contributor.authorLeón Jimenez, Melissa Andrea
dc.date.accessioned2017-08-14T20:39:43Z
dc.date.available2017-08-14T20:39:43Z
dc.date.issued2015
dc.identifier.citationT361.782 / L551es
dc.identifier.urihttps://hdl.handle.net/11227/5055
dc.identifier.urihttp://dx.doi.org/10.57799/11227/11232
dc.descriptionTesis (Trabajador social) -- Universidad d e Cartagena. Facultad de Ciencias Sociales y Educación, programa de trabajo social, 2015es
dc.description.abstractVivimos en un país rico en diversidad, desde la variedad de climas, pasando por las múltiples razas y etnias. Teniendo en cuenta esto, en nuestra carta magna se han establecido principios reguladores relacionados con: el derecho a la igualdad, a la justicia y a las libertades individuales. Dichos derechos pasan a ser fundamentales para la buena convivencia, vivir la ciudadanía, además de establecer relaciones respetuosas y solidarias entre miembros de la comunidad en la que nos hallemos inmersos ya sea vecinal, educativa u otra. Pero el establecimiento de estos derechos consignados en nuestra constitución, no ha sido suficiente para que sean respetados ni vulnerados, así como tampoco han logrado que los ciudadanos aprendamos a transformar los conflictos que surgen como resultado de la diversidad, tan notorios en nuestra relaciones personales ya sea en el trabajo, en el barrio o en la escuela. Es en este último ámbito en el que queremos concentrar particularmente nuestra atención, debido a que los ciudadanos esperan que dentro de las instituciones se formen niños, niñas y jóvenes con capacidades para enfrentar y transformar todo tipo de conflictos. Se hace necesario para ello, enriquecernos en competencias ciudadanas y habilidades sociales, lo que permitirá fortalecer la convivencia, disminuyendo de esta forma los niveles de violencia. De esa manera podremos transformar mejor los conflictos, y veremos en el diálogo y la escucha vías seguras para transformarlos no solo al interior de los centros educativos sino también en las familias, donde de igual manera es inevitable que surjan diferencias y desacuerdos. La labor inalcanzable que se ejecuta al interior de estos centros de formación (la escuela) es digna de destacar. Una gran cantidad de niños, niñas y jóvenes acuden a los planteles a diario, en aras de adquirir conocimientos vitales, que los preparen para el ahora y para un futuro cuando emprendan sus propios caminos. Pero si bien la labor de los docentes, directivos y demás miembros de las instituciones está en 9 brindar al estudiantado conocimientos, no deslinda esto con la necesidad de brindarles las condiciones para que puedan desarrollar sus habilidades, aptitudes y competencias. Esto va más allá de las simples sumas y restas o de la enseñanza de un segundo idioma. Se hace necesario que los estudiantes, desarrollen sus capacidades para la escucha, la tolerancia y el respeto por el otro, su punto de vista y sus diferencias, lo que les permitirá comprender a ciencia cierta de que en el mundo no se hallan solos, que son seres sociales por naturaleza, debiendo aprender a convivir e interactuar con ese otro que le rodea y del cual necesita para ser y ser nombrado. Al interior de las escuelas se adelanta, desde las instancias de bienestar estudiantil y en conjunto con la comunidad educativa en general, acciones que persiguen este querer, con el objetivo de enseñar y ayudar a que los estudiantes aprendan a vivir en comunidad, relacionarse y transformar las situaciones de conflicto que a menudo suele aparecer como causa de las diferencias entre seres humanos. He aquí donde la institución educativa Promoción Social le aporta (con su proyecto de convivencia conocido como, “La vida es una fiesta bailemos al son de la convivencia”), a la reducción en el número de casos de agresiones tanto físicas como verbales, brindando herramientas para convivir y aprender a transformar las diferencias y conflictos resultantes de esta interacción permanente durante la jornada escolar; utilizando mecanismos para la construcción de un sano clima que permita a los estudiantes desarrollar plenamente sus potencialidades, dando lo mejor de cada uno por construir el colegio que esperan y sueñan. Este proyecto se gestó en la institución para el año 2011 y se enmarcó dentro del manual de convivencia, resaltando de esta manera su importancia y pertinencia, en búsqueda de soluciones factibles y eficaces, que lograran una salida a la problemática que se reflejaba, como lo era, el rápido aumento en los índices de agresiones, peleas y disputas entre el estudiantado1. 1 EN EL ALBOR DE LA MEDIACIÓN. Capitulo II, Línea Base. p. 48. 10 Se requería que los directivos y docentes encaminaran su accionar en pro de soluciones que brindaran un ambiente óptimo en la institución, teniendo conciencia que con esto no se lograría acabar o eliminar los conflictos, pero sí trabajar juntos en aras de mejorar el clima escolar. Sin llegar hacer surrealistas, se pretende que antes de que los logros se hagan evidentes a nivel macro, o de una sociedad, se deben unir esfuerzos para que empiecen a gestarse con resultados satisfactorios al interior de las escuelas. Para ello la elaboración y ejecución del proyecto mediadores y mediadoras escolares en la institución Promoción Social, brindara bases para la consecución de buenos resultados a la hora de transformar los conflictos presentes en cualquier esfera. Con este proyecto se potencializa a los estudiantes de manera que se empoderen enfrenten y transformen los conflictos que viven, haciendo uso de la escucha y el dialogo, viendo en la mediación una alternativa segura y viable. “Colombia es uno de los países con mayores cifras de matoneo, 1 de cada 5 niños en las escuelas son víctimas de ello. En el más reciente estudio de la Universidad de los Andes, donde se evaluó la respuesta de cerca de 55 mil estudiantes en 589 municipios del país, en las Pruebas Saber de los grados quinto y noveno, se encontró que el 29% de los estudiantes de 5° y el 15% de 9°, manifestaban haber sufrido algún tipo de agresión física o verbal de parte de algún compañero”2. No hace falta estar ciego para no darnos cuenta de que esta problemática crece y crece cada vez más.es
dc.format.mediumapplication/pdf
dc.language.isospaes
dc.publisherUniversidad de Cartagenaes
dc.rights.urihttps://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0
dc.subjectConflicto sociales
dc.subjectViolencia infantiles
dc.subjectTrabajo social escolares
dc.subjectAsistencia escolares
dc.titleSistematización, logros y desafíos del proyecto: Mediadores y mediadoras escolareses
dc.typeTrabajo de grado - Pregradospa
dc.rights.accessopenAccess


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